28.09.14
Parálisis facial. Preguntas frecuentes.
Por Doctor Carlos López
¿Por qué se producen las parálisis faciales?
Hay muchas causas, pero la más frecuente es la parálisis idiopática, que no se conoce muy bien. Muchas veces se asocian a cambios bruscos de temperatura, a estar acalorado y salir al frío, y también a procesos inflamatorios o a infecciones en el nervio facial, o por tumores o por golpes. Y en algunos casos puede ser producto de alguna cirugía. Otra causa son las enfermedades cerebrovasculares que producen daños en el control cerebral de los movimientos de la cara
¿Qué hay que hacer en estos casos?
Es muy importante hacer un estudio completo para analizar el estado del nervio facial e identificar el sitio de la lesión, sus causas y establecer si amerita algún tipo de tratamiento con microcirugía.
¿En qué momento es necesaria la microcirugía?
Cuando la causa es un golpe, una fractura, un tumor o una cirugía previa, es muy probable que el paciente sea candidato a estos procedimientos, lo más pronto posible. Así se evitará que los músculos, que son movidos por los impulsos nerviosos, se atrofien y pierdan la capacidad de recuperar el movimiento. Una consulta con uncirujano plástico experto en microcirugía es vital.
Muchas parálisis son intervenidas con fisioterapia. ¿No siempre funcionan?
Hay casos, como cuando la parálisis se produce cuando una persona acalorada se expone a cambios bruscos de temperatura, la recuperación con fisioterapia puede ser efectiva en un ciento por ciento. Pero si con el transcurso el tiempo no se observa mejoría, es prudente considerar una valoración del microcirujano. En casos de golpes, fracturas o tumores esa valoración debe ser mucho más temprana, pues probablemente se necesite una cirugía para reconstruir ese nervio lo más pronto posible.
¿Qué tan efectiva es la microcirugía?
En caso de que no se haga, en los casos mencionados, las posibilidades de recuperación son muy bajas. La microcirugía aumenta representativamente esa recuperación. Depende de cada caso en particular, pero en algunos casos la recuperación de la función del nervio de la cara es del 90 o el ciento por ciento. El porcentaje de los que no se logran recuperar es realmente muy bajo. El mensaje es que con los recursos de la microcirugía es posible mejorar ostensiblemente las secuelas de esas lesiones.
La parálisis facial no es sólo un tema estético...
Claro, no es solo un tema estético, aunque la apariencia es una de las funciones más importantes de la cara. Con ella nos relacionamos con los demás y cualquier alteración, por pequeña que sea, puede paralizar los movimientos y causar una deformidad. Pero más allá de la apariencia, las implicaciones son funcionales: dificultades para hablar, pues el aire se va a salir con más facilidad de la boca, las consonantes van a ser más difíciles de pronunciar y van a surgir alteraciones en la alimentación, pues se necesita de la competencia normal de los músculos faciales para poder comer. También surgen dificultades para cerrar el ojo. El ojo se reseca y esa resequedad puede producir perforaciones en la córnea. El lagrimeo va ser constante, porque el músculo quebombea las lágrimas también se paraliza. Todas esas alteraciones son muy graves. Y toda esa deformidad es la que más incapacita.
¿Qué pasa con esas personas que sufrieron una parálisis facial y se dejaron así?
El tiempo es fundamental, mientras más temprano se busque la recuperación, mayores posibilidades existen para una recuperación óptima. Pero existen alternativas para pacientes que dejaron pasar el tiempo, con técnicas de microcirugía. Así haya pasado el tiempo y la parálisis haya evolucionado, la microcirugía puede ayudar a mejorar la función de la cara. Nunca es tarde.